Guácala que ricoooo…
La popularidad de Miguel Herrán continúa in crescendo. El actor de Élite ha conquistado a medio mundo especialmente tras su participación en La Casa de Papel, donde se mete en la piel de Río, uno de los personajes más queridos de la exitosa serie de Netflix.
El intérprete malagueño, que acumula más de 14 millones de seguidores en las redes sociales, está volcado en un nuevo y apasionante proyecto, Hasta el cielo, de Daniel Calparsoro, en la que comparte protagonismo con el consagrado Luis Tosar.
Y para darle proyección a su nuevo trabajo, el actor se encuentra dando entrevistas y subiendo fotos a su cuenta de Instagram.
Su más reciente imagen en la famosa plataforma, es una muy reveladora, en donde posa como dios lo trajo a este mundo, y que ya está encendiendo pepitas.
El actor asistió recientemente a la 23 edición del Festival de Cine de Málaga, el certamen que lo vio crecer como actor, para hablar con total naturalidad y sinceridad de las consecuencias que la ha traido la fama.
«Creo que la fama la gestionas a ratos. Tienes momentos muy buenos en los que tienes los pies en la tierra y momentos en los que cuando te quieres dar cuenta… Creo que nunca he llegado a ‘despegar’, pero sí que he estado flotando…», explica el actor.
Además ha reconocido que el universo de la fama y el dinero le ha transformado en ciertos aspectos. «Cuando te quieres dar cuenta, la sociedad te empuja a meterte en un sitio en el que, aunque no quieras entrar, te acabas metiendo. Es muy difícil que este mundo no te absorba».