El atractivo de Jason Momoa es imposible de negar. En una industria llena de actores cada vez más jóvenes y guapos, Momoa tiene una especie de carisma y encanto que resulta completamente auténtico y que tiene enloquecidos a una buena parte del público. Y, como demostró durante una aparición reciente en el programa ‘Jimmy Kimmel Live’, también tiene sentido del humor cuando se trata de su condición de símbolo sexual.
Durante una sección llamada ‘Make It Sexy’ (‘Hazlo sexy’, en español), Momoa tuvo el desafío de realizar tareas cotidianas de la forma más sensual posible. Y así fue como, quitándose sus prendas para poder darlo todo, el actor se entregó al juego e hizo frente al primero de los desafíos: desinfectar sus manos.
«Tengo una botella de Purell aquí mismo», dijo, antes de comenzar a empaparse todo su trabajado cuerpo con el producto.
«Normalmente me gusta rociarlo por todo mi pecho… A veces lo froto por todo mi rostro, porque mata el 99,99% de las cosas», decía mientras se aplicaba el producto por el cuerpo de una forma muy provocadora.
El presentador invitado Anthony Anderson también se unió a la acción, quitándose la camisa y frotándose el gel por todo el pecho, mostrando simultáneamente los resultados de su reciente pérdida de peso. Andersón perdió casi 5 kilos como parte de su misión de volverse «sexy hombre adulto».
Tras esto, llegó la segunda prueba, la cual se trataba de otra tarea mundana que es bastante más difícil de hacer sexy: abrir una lata de atún. Pero Momoa se negó a hacerlo mal y pareció abrir la lata usando nada más que la presión de su bíceps… luego procedió a verter directa y sensualmente el contenido de la lata en su boca y comer el atún con sus propias manos (al menos sabemos que las tenía bien limpias).
La tercera y última tarea fue más sencilla: planchar una camisa. «Lo que me gusta hacer es poner un poco de aceite para bebés y frotarme todo eso primero», dijo Momoa, antes de proclamarse vencedor del desafío.