Los museos a menudo captan una reputación por ser «aburridos», pero sabemos de uno que tiene algo que te puede entretener mucho. Aunque desafortunadamente, no es para uso, solo para ser visto.
Se trata del famoso Glory Hole, ese que muchas de ustedes disfrutan en los baños públicos. La reacción de los visitantes ante esto ha sido negativa, pero el Western Australian Museum defiende su decisión de retratar el tema controvertido.
La puerta del inodoro con un orificio considerablemente grande, fue rescatada por el activista Neil Buckely en 1997. Suponemos que escondió la puerta cada vez que tenía invitados durante los últimos 21 años.
En declaraciones a la voz de Perth, Buckley dijo: «Estoy seguro de que esta exhibición traerá muchos buenos recuerdos para muchos de los hombres que utilizaron esta cultura como una forma de conocer a otros hombres homosexuales para formar una amistad, una asociación, un encuentro íntimo, etc».
Es interesante que la pieza provenga de un momento en el que ser gay era ilegal en Australia, así que marca una era y un lugar que representa la unidad en la represión. También describe cómo el famoso Glory Hole ha ido «desapareciendo» debido a las apps de ligue como Grindr.
El jefe ejecutivo del museo, Alex Coles agregó: «Hablamos a menudo de los museos como lugares seguros para ideas inseguras. Los lugares en los que puede explorar temas que pueden ser controvertidos, a veces polémicos, a veces incluso conflictivos, pero el tipo de lugares en los que se pueden explorar de manera responsable y mesurada y, con suerte, sin rencor».