Kévin Mayer, atleta y componente de la selección Francesa, cuenta con el récord mundial de decatlón, entre otros méritos. Es un deportista con mayúsculas, pero también es capaz de deleitarnos con su espectacular físico.
Hace tiempo comenzaron a escucharse rumores sobre la supuesta homosexualidad de Mayer. “Estoy soltero. Todos dicen que soy gay en las redes sociales. No sé de dónde viene…».
Sin embargo, y para mi mala suerte, el corazón de Kévin Mayer ya es de alguien: Delphine Jariel. Ella es la campeona francesa de windsurf. Uno de sus proyectos comunes es participar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Rubio, con 26 años y 1,86 de estatura. Como se dice comúnmente, el yerno perfecto. Ya conocemos lo que es capaz de hacer en competición. Quién sabe cómo se podría manejar en otros ámbitos de su vida. Y, bueno, ahora que se acaba el verano, queremos subir un poquito la temperatura. Dense su taco de ojo:
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